Imagina que tu vida es un viaje fascinante, un cauce lleno de oportunidades y desafíos que tenes que atravesar para llegar a un objetivo. Para disfrutar ese viaje es clave que aprendas a ser como el agua que fluye y ocupa los lugares disponibles en el momento presente, sin oponerse a la resistencia de una piedra cuando intenta bloquear su paso. El agua, sabia y adaptable, contornea la piedra y continúa su cauce, abrazando la docilidad, sorteando las dificultades con gracia y determinación, trazando nuevos cursos hacia horizontes inexplorados.
Ser como el agua implica superar obstáculos y encontrar la verdadera esencia de nuestra existencia. Cuando despertamos a nuestro observador interior y escuchamos la voz sabia del alma podemos experimentar una transformación profunda siguiendo las leyes de la naturaleza.
Te invito a liberar el peso de tus preocupaciones, deshaciéndote de la tensión que llevas en tus hombros y en tu cuello. Cuando las cosas no vayan según tus planes, relaja la mandíbula y observa con atención, ya que es posible que la resistencia a soltar te impida ver oportunidades valiosas que te están esperando.
Flexibiliza tus creencias porque todo cambia en este mundo, todo está en constante movimiento y aquello en lo que crees hoy puede no ser necesario mañana.
Adopta la mentalidad del agua, flui con la corriente y vas a ver como todo se acomoda naturalmente. Soltá las cargas innecesarias para que se abran las puertas a nuevas posibilidades.
La verdadera magia reside en abrazar la adaptación, la resiliencia y la maravillosa danza del cambio. ¡Flui como el agua y deja que la armonía inunde tu camino, transformando tu vida en un cuento extraordinario!
Vecca Preetz 
Sabiduría del manantial que se transforma en Río y se perpetúa en Océano.
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